La Hermandad del Prendimiento renueva su devoción en una emotiva jornada de Sábado Santo

Como ya es tradición en años anteriores, miembros de la Junta de Gobierno de la Hermandad del Prendimiento participaron en la jornada del Sábado Santo en un acto de profunda devoción y fraternidad. En primer lugar, acudieron al convento de Capuchinos para rendir homenaje a Nuestra Señora del Dolor, la joya de Capuchinos, quien se presentaba en solemne besamanos y vestida de riguroso luto en su pequeña y recogida capilla.

Este gesto simbólico cobra especial significado para la corporación, dado el fuerte vínculo que une a ambas cofradías. La Hermandad del Prendimiento mantiene un gran cariño por la Santísima Virgen bajo la advocación de los Dolores, titular mariana que preside cada año la Procesión del Silencio en la noche del Jueves Santo.

Tras este primer acto, los representantes se desplazaron a la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, donde elevaron una oración ante la imagen de Nuestra Señora de la Soledad, también protagonista del Sábado Santo. La Virgen se presentaba en un entorno de sobrecogedora solemnidad, rodeada de cera e inmersa en un jardín de flores, transmitiendo un mensaje de esperanza y gloria en la jornada más íntima de la Semana Santa.